Bodega Etú: un sueño alemán cumplido en Cádiz

15 Julio, 2020

Ute Mergner y su marido Hans Nerlinger  decidieron poner fin a su atareada vida en las zonas populosas de su Alemania natal y se asentaron en Patria, una pedanía de Vejer de la Frontera. No sabían nada de producción de vinos pero han conseguido hacer su sueño realidad con la Bodega Etú.

Hace veinte años Ute Mergner, procedente de Baviera, era una exitosa diseñadora industrial de productos en una multinacional de origen sueco y su marido, Hans Nerlinger, también originario del mismo länder, trabajaba en su estudio de arquitectura, ambos con una vida un tanto estresante. Era el año 2000 cuando decidieron emprender una nueva vida y, después de descartar diversos destinos y Continentes, optaron por el sur de Europa, descartaron Italia y, finalmente, eligieron las campiñas cercanas al turístico Vejer de la Frontera, en la provincia de Cádiz, a pocos kilómetros de las mejores playas atlánticas.

Surtido Etú

Colección de vinos de Bodega Etú

El inquieto matrimonio no llegó a nuestro país para dedicarse a la dolce far niente, sino sólo para cambiar radicalmente su activo estilo de vida. Tras recorrer numerosas comarcas, al fin encontraron su aposento en Patria y Ute se empeñó en cumplir su vieja idea de dedicarse a la producción artesanal de vinos. Adquirieron una hectárea de terreno y Hans diseñó la pequeña bodega. Su idea era dejar en manos de viticultores de la zona el know how de todos los procesos de producción. En 2003 ya estaban sembradas las viñas en sus terrenos y Ute comenzaba a experimentar por sí misma. Quería sacar vinos blancos, rosados y tintos, pero no sabía nada de los procesos y variedades de uva adecuadas.

Depósitos

Aquí se realiza la fermentación

Con su sueño bajo el brazo acudió al Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera IFAPA de la Junta de Andalucía en Jerez de la Frontera, y allí fue guiada por Belén Puertas. También su entusiasmo encontró justa correspondencia en Víctor Palacio, del grupo de investigación de Ingeniería y Tecnológica de Alimentos de la Universidad de Cádiz y Ute se incorpora a numerosas prácticas con alumnos de la Universidad, que también la ayudan en su proyecto.

Poco a poco comienza a tomar sus propias decisiones y a construir su propio know how. Los viticultores de la zona están especializados en sus propios caldos de orientación jerezana y ella va diseñando el futuro de sus vinos y sufriendo decepciones en el camino. La variedad tempranillo no era adecuada a sus viñedos, orientados hacia el Atlántico, con unas características específicas de humedad. Prueba las sauvignon blanc y chardonnay para blancos, las syrah, merlot y cabernet sauvignon para tintos y, cosecha tras cosecha, el grupo de entusiastas va modificando los coupages y determinando la incorporación de otras variedades, como la autóctona tintilla de Rota, para añadir más cuerpo. Aún así, la producción propia no alcanzaba el grado suficiente y se optó por la compra de una parte de uvas que aportase algo más de azúcar al mosto, hasta el momento actual, en el que reina una más que ganada, aunque no completa, satisfacción. En Bodega Etú siempre se piensa que la excelencia en grado máximo estará permanentemente por llegar.

El pequeño laboratorio

El pequeño laboratorio de la bodega

La pequeña producción tiene más mérito, si cabe, ante el rechazo a la utilización de pesticidas y abonos. El sueño alemán de Ute Mergner se va perfeccionando cosecha tras cosecha, con producciones que rondan de media algo más de 4.000 botellas que se comercializan casi en su integridad en su propia comarca de La Janda, sin más estructura comercial que la propia Ute, que recorre los restaurantes y establecimientos de venta de vinos y hace las entregas.

Aún le queda tiempo para nuevas iniciativas y este año saca una edición limitada de dos espumosos, blanco y rosado, con la marca “Erupción”, que han recibido calificaciones muy positivas en las catas celebradas este año tras el desconfinamiento.

Erupción

Los nuevos espumosos "Erupción"

El COVID-19 también ha trastocado las previsiones de esta pequeña bodega y por eso ahora está operativa la venta on-line a través de su página Web www.etu-vino.com. Bodega Etú no tiene ninguna previsión de crecimiento, porque implicaría crear una estructura distinta a la actual y su propietaria prefiere seguir manteniendo su sueño hecho realidad en su actual formato en el que, aparte de los consejos y sugerencias de sus amigos, sólo precisa ayuda para la vendimia y para el embotellado y etiquetado, que confía a otra empresa gaditana.

Bodega Etú, confiesa su creadora, no da beneficios, pero no le importa, porque es a lo que se quiere dedicar. Pero su actividad no termina en ser el todoterreno de esta mini explotación vitivinícola: gestiona además tres casas rurales. “Los alojamientos –dice- sufragan a la bodega”. No hay sueño barato.

Pipas

Algunos toneles en la bodega

Y mientras Ute labora y vigila entre sus vides de Etú las acechanzas de posibles plagas de micro-organismos, insectos, roedores y pájaros, Hans Nerlinger también ha cumplido su propio sueño, aunque éste es de mayor altura. Ha abandonado los proyectos arquitectónicos que eran su vida anterior y fundado una escuela de pilotos de aviación en Jerez, de la que es instructor. Sueños alemanes de este matrimonio hechos feliz realidad en Cádiz.

Ute Mergner

Ute Mergner, con el viñedo atrás y el azul del Atlántico al fondo

28 Septiembre, 2020

Para comunicarse de verdad, antes estuvo el telegrama con varios “stop”...

01 Octubre, 2020

Han transcurrido casi 188 años desde que Mariano José de Larra publicase...

03 Marzo, 2022

No se recuerda el inicio de la disputa, pero...